Toma chocolate ...
He escuchado tanta música a lo largo de mi vida que se me ocurre una canción para casi todas las situaciones y para casi todos los acontecimientos. Estos días, cuando me enteré del nuevo dilema del gobierno cubano, me vino a la mente la canción "El bodeguero". La canción fue escrita por Richard Egües, virtuoso de la música conocido como "la flauta mágica" y músico de una de las orquestas más famosas de Cuba, La orquesta Aragón. El gran Nat King Cole también cantó El Bodeguero con su simpático acento americano. Bodeguero era el propietario de una tienda de comestibles donde también se reunía el vecindario para conversar y tomar algo. Antes de que llegara Fidel Castro, las nacionalizara y las sustituyera por los casi vacíos y feos locales, donde ahora la gente, como mucho, intercambia historias sobre víveres faltantes, estanterías vacías y destinos desesperados, las bodegas eran un lugar de encuentro para la gente mientras el bodeguero, el vendedor, embolsaba la compra.
El estribillo de El bodeguero a ritmo de Cha cha chá, dice: Toma chocolate, paga lo que debes.

En estos días se ha sabido que se está celebrando un proceso judicial en Londres ante el Tribunal Superior de Justicia británico, por una demanda contra el Banco Nacional de Cuba y la República de Cuba. El demandante es un denominado "fondo buitre" llamado CRF I Limited, una sociedad mercantil extraterritorial con sede en Gran Caimán. Es bien sabido que los "fondos buitre" compran, entre otras cosas, deuda soberana a precios de subasta en el mercado secundario para exigir su reembolso inmediato bajo amenaza de acciones legales. Esto, un negocio común en el sector financiero capitalista.

Para los lectores rápidos, la versión corta de la historia:
El gobierno cubano había contraído préstamos a través de su banco estatal Banco Nacional de Cuba; no puede pagar la deuda; releva al Banco Nacional de Cuba de su papel de banco estatal y funda el Banco Central de Cuba con este fin, que, sin embargo, no quiere responder de las deudas del antiguo banco estatal Banco Nacional de Cuba (porque no se había hecho cargo explícitamente de estas deudas estatales). Por esta razón, Cuba se niega a pagar sus deudas al nuevo acreedor CRF I Limited.

Para los que quieran saberlo con exactitud:

Objeto de este litigio es la deuda pública contraída por el Banco Nacional de Cuba antes de 1997, cuando aún tenía funciones de banco central.

En 1997 se creó otra institución, cuyos detalles figuran en el Decreto 172 del Banco Estatal de Cuba, de 28 de mayo de ese año:
"Se crea bajo la denominación de Banco Central de Cuba una institución como autoridad rectora, reguladora y supervisora de las instituciones financieras y de las oficinas de representación que radiquen en el país, incluyendo el centro bancario extraterritorial, las zonas francas y los parques industriales. Es el Banco del Estado, posee autonomía orgánica , personalidad jurídica independiente, patrimonio propio y cubre sus gastos con sus ingresos, no respondiendo de las obligaciones del Estado, sus organismos, órganos, empresas y otras entidades económicas, excepto en el caso que la asuma expresamente. "
Y esto es exactamente lo que está haciendo ahora el gobierno cubano para salir del papel de deudor. Según comunicado oficial: Desde 1997, el Banco Nacional de Cuba ya no está autorizado a actuar en nombre del gobierno cubano. Tampoco podía autorizar la cesión de deuda pública sin la aprobación previa del Ministerio de Finanzas y Precios y del Consejo de Ministros, ya que el Banco Nacional de Cuba no podía autorizar en ningún caso la cesión de los avales que había concedido. Representantes de fondo buitre propusieron a funcionarios cubanos, funcionarios cubanos que tenían responsabilidades en el manejo de la deuda externa, actuar de forma contraria a lo establecido en las leyes vigentes, violar los procedimientos que se exigen para que el banco Nacional de Cuba y el gobierno aprueben o no la cesión de la deuda. Como resultado de esa propuesta actuaron de forma ilegal, elaboraron y entregaron documentos a los representantes del fondo buitre que, supuestamente , demuestran que el banco nacional y el estado cubano estaban de acuerdo en que el fondo buitre fuera nuestro acreedor. La acción ilegal de estos funcionarios cubanos, uno de forma dolosa, otros por negligencia, falta de atención y control, invalida la cesión de la deuda.

En su informe para la televisión nacional, prácticamente se reveló, por otra parte, cómo la cúpula cubana  pretende cambiar lo que hay que cambiar, para evitar o cancelar deudas y obligaciones internacionales. En su reportaje para la televisión nacional, afirmaron claramente que la deuda de 72 millones de euros, cuya existencia no negaron, quedó sin efecto o prácticamente anulada al cambiar la base jurídica haciendo expresamente que el Banco Central (creado en 1997) no respondiera de las deudas del Estado, sus organismos, instituciones, empresas y otras entidades económicas.

El tribunal decidirá ahora si CRF I  Limited es acreedor del Banco Nacional de Cuba. Los cubanos rebaten que no es, ni lo haya sido nunca.

Al parecer, la deuda original procede de préstamos concedidos por Crédit Lyonnais y L'Istituto Bancario Italiano en 1982 y 1984, según información no confirmada que he encontrado en Internet.

En resumen: el Gobierno cubano ha contraído préstamos a través de su banco estatal, el Banco Nacional de Cuba; no puede pagar; releva al Banco Nacional de Cuba de su papel de banco estatal y crea entonces el Banco Central de Cuba para este fin, que, sin embargo, no responde de las antiguas deudas.

¿Va Cuba camino de la insolvencia estatal? ¿Quizá ya ha llegado el final? Sospecho que sí, pero no lo sé. En mi opinión, Cuba nunca podrá hacer frente al servicio de estas y otras (muchas deudas). En lugar de intentar timar a los acreedores, el gobierno cubano debería ver cómo puede conseguir que la economía, que ha paralizado con sus medidas antieconómicas, vuelva a funcionar (hay que reconocer que no es pan comido); cómo puede persuadir a los acreedores para que condonen la deuda; y cómo puede conseguir por fin un cambio tangible, incluso políticamente. Pero desde luego no con los anteriores y actuales actores antidemocráticos. Como ya he dicho, la economía cubana está en manos de aficionados. Y no hay luz al final del túnel.

En cualquier caso, no es así como los acreedores imaginaron el negocio.
Quizá en lugar de hablar del fondo buitre, deberíamos hablar del Pleitegeier (término en alemán, literalmente: buitre de la quiebra, símbolo proverbial de la quiebra).
Nat Neumann, enero de 2023